Descubre la grasa para broncear con monoï de Tahití y aprende a utilizarla
Para broncearse durante todo el verano, cada uno tiene sus trucos. Están las que preparan las semanas antes, las que solo confían en la playa y el combo bikini/bañador, y las adictas, bronceadas todo el año y dispuestas a todo para mantener el bonito tono de su piel. Para ellas, pero también para todas las demás, Corine de Farme ha formulado una grasa de ordeño con Monoï de Tahití, ylang-ylang y resistente al agua.
La grasa de ordeño, una definición sencilla
La grasa de ordeño, como su nombre indica, es un cuerpo graso originalmente destinado a facilitar la ordeña manual de vacas por los ganaderos. Hoy en día, más valiosa y sofisticada, se usa principalmente para broncearse rápidamente.
El principio es el siguiente: los agentes grasos reflejan los rayos UV en la superficie de la piel y generan un efecto lupa que acelera visiblemente el cambio de color de la epidermis y, por tanto, la intensidad del bronceado.
Durante años, mujeres y hombres la han utilizado para obtener un bronceado intenso, casi marrón y muy reconocible.
Sin embargo, y porque hoy conocemos los efectos nocivos del sol y los UV sobre la piel, es muy importante recordar que la grasa de ordeño Monoï de Tahití no ofrece ninguna protección. A diferencia de las cremas solares anti-UV que filtran y retrasan los efectos del sol (sobrecalentamientos, quemaduras solares, quemaduras…), la grasa de ordeño los amplifica y acelera.
Por eso, recomendamos usarla solo si ya estás bien bronceada o si tienes la piel naturalmente morena. En todos los demás casos, prefiere aplicar una protección solar adecuada a tu tipo de piel y evita exponerte en las horas más calurosas.
La grasa para broncear con monoï de Tahití, un placer para los sentidos
El encanto de la grasa para broncear reside también en su fragancia. Desde hace mucho tiempo asociada al monoï, evoca fácilmente la arena caliente, la playa, las aguas turquesas y las vacaciones.
Su textura fundente y rica permite incluirla en todos tus rituales de bienestar veraniegos. Después de la playa, después de la piscina, después de la ducha o antes de salir por la noche, aplícala en una capa generosa y masajea bien para que penetre, logrando una piel satinada.
¿Lo sabías? La grasa para broncear Corine de Farme contiene ingredientes naturales beneficiosos para tu piel: aceite de coco, extracto de flor de tiaré, aceite de semillas de girasol y vitamina E, entre otros.
Los beneficios ancestrales del monoï para la piel
El monoï se obtiene mediante la maceración de flores de tiaré en aceite de coco. Así, sus virtudes para la piel son muy numerosas. Los ácidos grasos presentes en el aceite de coco ofrecen, por ejemplo, una hidratación intensa.
La vitamina E protege y regenera la epidermis, mientras que los antioxidantes previenen el envejecimiento cutáneo.
Por último, los ácidos grasos saturados y la hoja de tiaré proporcionan un verdadero alivio frente a las irritaciones y pequeñas rojeces habituales, especialmente en verano.
También cabe destacar, y es el pequeño truco de Corine de Farme, que el monoï de Tahití es también muy bueno para proteger el cabello, nutrirlo y repararlo. Aplicado como mascarilla o baño en los largos, hace maravillas.
Corine de Farme, solares diseñados en Francia para proteger tu piel
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