Comprar una crema de manos

La piel de las manos tiene la particularidad de ser un poco más fina que en el resto del cuerpo. Constantemente expuesta a agresiones externas, requiere la aplicación de cuidados hidratantes y regeneradores específicos.

Las particularidades de la piel de las manos

Al igual que la del rostro, la piel de las manos está constantemente expuesta a agresiones externas. Su sequedad natural se ve agravada por varios elementos.

Así, el frío, el sol, la contaminación, los productos de limpieza o el agua calcárea debilitan la piel fina de las manos, que se vuelven secas y ásperas.

Además, la piel de las manos tiene pocas glándulas sebáceas. La producción de sebo es, por tanto, reducida y con ella, el papel protector de la piel.

Si no se hace nada para protegerlas, pueden aparecer grietas y fisuras. Además de su aspecto antiestético, estas afecciones son bastante dolorosas. Para evitarlas, es necesario cuidarlas y elegir una buena crema para las manos.

Restaurar su confort usando una crema para las manos

Las cremas de cuidado para las manos tienen dos acciones: limitar la sequedad y así ralentizar el proceso de envejecimiento. Al restaurar la película hidrolipídica, protegerán tus manos de las diferentes agresiones a las que están expuestas diariamente y repararán las pequeñas afecciones que las afectan.

Para ello, elige cremas ricas en ácidos grasos contenidos en aceites vegetales como el aguacate, la almendra dulce o el sésamo, o en ceramidas. Para mayor protección, también puedes optar por una crema que contenga activos reparadores de las uñas, que también sufren especialmente por el frío.

 Finalmente, algunas cremas para las manos combinan activos reparadores e hidratantes, así como activos anti-edad o anti-manchas oscuras.

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