Cold Cream: ¿cuándo utilizarla?

pediatra

Dr. Valleteau de Moulliac,
Pediatra asesor de los Laboratorios Sarbec

Cold Cream: ¿cuándo utilizarla?

La «Crema fría» tiene una historia muy larga, ya que fue inventada en el siglo II por Galeno, uno de los padres de la medicina. En realidad, se trata de una ««crema refrescante»» o ««crema fría»» de los anglosajones, compuesta originalmente por aceite de almendra dulce, cera de abeja y agua de rosas, que daba en la piel una sensación de frío. Desde siempre, la Crema fría ha sido apreciada por sus virtudes nutritivas y protectoras.

Esta fórmula ciertamente ha atravesado el tiempo (evolucionando en su composición), pero sigue siendo muy utilizada hoy en día, especialmente en forma de preparaciones magistrales realizadas en farmacias.

Por lo tanto, es una fórmula sobreengrasante e hidratante que combate eficazmente la sequedad cutánea: protege, calma, repara e hidrata intensamente la piel. Es una crema muy eficaz para mantener y proteger la barrera lipídica de la piel, preservándola de las agresiones externas, especialmente del frío.

Por eso se recomienda, por supuesto, para pieles realmente muy secas sin importar el clima, pero sobre todo cuando hace frío (el frío reseca enormemente la piel). Es una especie de cobertura para la piel en caso de mucho frío.

La “cold cream” puede utilizarse a cualquier edad y es apta para toda la familia.

Su bebé, que tiene la piel frágil y sensible, la apreciará especialmente en el rostro durante las salidas al frío, como en los deportes de invierno.

Dra. Valleteau de Moulliac