Las ventajas de una bolsa para el cambio del bebé

Más práctico que una bolsa de deporte, menos frágil que un bolso de mano y más organizado que un bolso tote, el bolso para cambiar al bebé es un imprescindible para las mamás que desean tener todo lo necesario para cambiar al niño a mano. Contiene numerosos compartimentos para transportar los pañales, los productos de higiene y los biberones.

Las ventajas de una bolsa para el cambio del bebé

Más práctico que una bolsa de deporte, menos frágil que un bolso de mano y más organizado que un bolso tote, el bolso para cambiar al bebé es un imprescindible para las mamás que desean tener todo lo necesario para cambiar al niño a mano. Contiene numerosos compartimentos para transportar los pañales, los productos de higiene y los biberones.

El bolso de pañales debe ser polivalente y transportable, sin precauciones. Debe tener grandes bolsillos con cierres de cremallera o velcro, asas, una correa para el hombro y una base reforzada. Elige uno en un material lavable y preferiblemente de color oscuro. Es probable que se ensucie y manche constantemente al lado del bebé.

¿Cómo organizar un bolso de cambio?
Un bolso de pañales suele tener una gran capacidad. Con grandes bolsillos, tiene forma de cartuchera, con cierres relámpago. Para ir a los abuelos, la niñera o la guardería, es imprescindible prever una ropa de recambio de la cabeza a los pies.

Un bolsillo debe contener la alimentación: el biberón, la merienda o la comida. El otro está reservado para la higiene con leche de baño, pañales, crema para el cambio y ropa de recambio, con zapatitos, pijama, capazo… Piensa en añadir algunos juguetes de estimulación, como sonajeros o libros de cartón.

¿Qué poner en un bolso de pañales?
El bolso de cambio del bebé debe contener pañales, bolsas de plástico para transportar los pañales sucios y toallitas. Según los modelos, puede incluir una esterilla de cambio integrada. Prefiere un modelo plastificado que se limpie con una esponja.

Versión ecológica, puedes prever pañales lavables de recambio, toallitas lavables y linimento oleo-calcáreo para limpiar las nalgas del bebé.

Siempre pon en el bolso de pañales una pequeña botella de agua de manantial, con la mención “apto para la alimentación de bebés”. Para preparar los biberones, opta por tetinas, biberones, botes dosificadores de leche con compartimentos herméticos y apilables. Una compota y una cuchara siempre son bienvenidas, si el bebé tiene un pequeño hambre.