¿Cómo bañar al bebé / baño del bebé, cómo hacerlo?
Momento de complicidad con el bebé, el baño debe realizarse con total seguridad. Si los padres saben que no hay que dejar solo a un niño en la mesa de cambiar, la seguridad es la misma en el baño.
Momento de complicidad con el bebé, el baño debe realizarse con total seguridad. Si los padres saben que no hay que dejar solo a un niño en la mesa de cambiar, la seguridad es la misma en el baño.
Un niño debe estar siempre bajo supervisión. Incluso con un asiento o un anillo de baño, el bebé puede resbalar y, dependiendo de su edad, puede ahogarse en menos de 10 segundos. Además, el baño es un momento esencial de higiene. Con productos de cuidado adecuados, el bebé debe lavarse del más limpio al más sucio, para evitar la propagación de microbios.
Preparar bien el baño del bebé antes de lavarlo
Reúne todo el material antes del baño para optimizar la seguridad. En el baño, una tabla o una pequeña mesa cubierta con una alfombra de cambiar y una toalla deben estar instaladas para enjabonar o sacar al bebé del baño. Prevé antes el gel lavante, un guante de baño, una capa de baño, un pañal y ropa de cambio.
En el baño, sumerge al niño en agua a 37°C. Verifica la temperatura con un termómetro. Un agua demasiado caliente puede causar una quemadura de tercer grado en segundos.
Sostén al niño a la altura de su brazo, con el antebrazo debajo de la cabeza. El baño no necesita durar más de un cuarto de hora. Algunos minutos de inmersión son suficientes para calmar y lavar al bebé.
Las reglas de higiene para lavar a tu hijo
Elige un producto lavante suave para el cuerpo. Con pH neutro, debe ser sin alcohol, sin parabenos, sin fenoxietanol, sin perfume… Si el niño tiene la piel seca, lo cual es frecuente en los pequeños, privilegia un jabón engrasado.
Comienza limpiando el cuero cabelludo, los brazos, el torso y luego las piernas. Con el guante de baño, termina por la zona del asiento. Lava de adelante hacia atrás esa zona, para no propagar la flora microbiana en la zona urinaria.
Al salir del baño, seca bien al bebé, dando golpecitos y prestando atención a los pliegues. Frotar con la toalla podría provocar una irritación.
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