¿Cómo realizar la higiene del bebé en la maternidad?
Después del nacimiento, a menudo en las primeras 24 horas, el bebé recibe su primer baño. Dependiendo de los niños, esta inmersión en el agua puede hacerse con total serenidad o entre llantos. Las madres y padres son acompañados por las matronas para ayudarlos a bañar al bebé y conocer los gestos indispensables para una higiene máxima, para el cuidado del bebé en la maternidad.
Después del nacimiento, a menudo en las primeras 24 horas, el bebé recibe su primer baño. Dependiendo de los niños, esta inmersión en el agua puede hacerse con total serenidad o entre llantos. Las madres y padres son acompañados por las matronas para ayudarlos a bañar al bebé y conocer los gestos indispensables para una higiene máxima, para el cuidado del bebé en la maternidad.
Antes de comenzar el baño, los padres deben lavarse cuidadosamente las manos y usar una toalla limpia y seca. El niño puede tener imperfecciones en la piel, como acné o costras de leche, que requieren lavarlo con un jabón graso.
El baño
El baño dura solo 5 minutos, en las primeras semanas. Con el paso de los meses, la duración se alarga, ya que el niño se cansa rápidamente y puede llorar durante el baño. Es importante preparar todo el material con antelación: una mesa para cambiar pañales, toallas, gel 2 en 1 para cuerpo y cabello, una bañera, un termómetro para baño, un pañal y ropa de cambio.
El baño comienza fuera del agua, enjabonar al niño. Se empieza por el cabello, los brazos, el vientre, las piernas, luego se levanta al bebé para lavar su espalda y su parte trasera, siempre de adelante hacia atrás.
Luego, el niño se sumerge en el agua de la bañera a una temperatura de 37°C. Es esencial mantener bien la nuca del bebé, sujetándole el brazo. Después, hay que sacar al niño del baño y secarlo suavemente envolviéndolo en una toalla, dando golpecitos en los pliegues para evitar que la humedad se quede.
El cuidado del ombligo
El ombligo tarda entre 7 y 15 días en cicatrizar. Es fundamental realizar cuidados dos veces al día para evitar infecciones. El cuidado se realiza en 2 etapas: desinfectar con un antiséptico suave y aplicar un producto secante.
Cada vez menos maternidades recomiendan colocar una compresa. El ombligo se endurece y oscurece, hasta que finalmente cae solo. No es necesario acelerar su caída prematura, ya que puede sangrar al hacerlo. Si el ombligo supura, puede ser signo de infección. Durante la cicatrización, es posible bañar al bebé y secarlo, sin frotar.
También te puede interesar:
Acné del recién nacido: ¿cómo eliminarlo?
¿Cuáles son los indispensables para el cuidado del bebé?
¿Cómo cuidar el cabello del bebé?