Agua de lavanda, un auténtico purificante para la piel

Ideal para toda la familia, el agua de lavanda tiene la particularidad de poder aplicarse en todo tipo de pieles, incluso las más sensibles. Con virtudes antiestres, incluso puede consumirse como bebida, para calmar una nerviosismo excesivo y aliviar tensiones.

En la piel, el hidrolato de lavanda puede aplicarse por la mañana y por la noche, para limpiar y perfeccionar el desmaquillado. Se recomienda para regular el exceso de sebo en pieles mixtas, preservando las zonas secas.

Las propiedades equilibrantes del agua floral de lavanda

Muchas personas confunden aceite esencial y agua floral por error. Muy concentrado, el aceite esencial solo puede usarse diluido con aceite vegetal. Para favorecer el sueño, el aceite esencial (AE) de lavanda puede aplicarse en un niño mayor de 3 años. Basta con mezclar 2 gotas de AE con 4 gotas de aceite vegetal y masajear la columna vertebral y la planta de los pies. Puede usarse, colocando 2 gotas en un pañuelo, cerca de la almohada o en difusión en la habitación antes de dormir.

El agua floral de lavanda puede usarse en bebés. La cantidad equivalente a 2 cucharadas en el agua del baño basta para relajar y calmar. El hydrolato se obtiene mediante una destilación de las flores por vapor de agua. La concentración de moléculas aromáticas es muy baja, lo que permite su uso en recién nacidos. Se recomienda preferentemente que sea orgánico, sin adición de perfume ni dilución.

El agua floral de lavanda está indicada para hombres, antes y después del afeitado, para calmar la irritación del rasurado.

El hydrolato de lavanda ideal para pieles mixtas

El agua floral se usa a menudo en loción sobre la epidermis, en un algodón o en nebulización, directamente sobre la cara. Limpia la piel, por la mañana, sin resecarla. Elimina los últimos restos de maquillaje y purifica las capas superiores de la piel, especialmente en la zona T (nariz, frente, barbilla).

Suavizante, es adecuada para pieles mixtas a grasas, por su capacidad de equilibrar la piel. El hydrolato puede ayudar a regular las pieles jóvenes o adultas con tendencia acnéica. A menudo, estas últimas son maltratadas con cremas secantes y mascarillas purificantes, que resecan la piel. Estos cuidados eliminan el exceso de sebo pero también el agua, lo que debilita la piel y la deshidrata completamente.

El agua floral de lavanda también calma las pieles irritadas, víctimas de picazón o eccema. Para un efecto óptimo, coloque su hydrolato en el refrigerador. El producto frío tendrá un efecto refrescante.

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