Higiene del bebé: ¿qué cuidados se deben tener?
El aseo del bebé debe ser un momento de intercambio entre los padres y el bebé. Aunque el baño permite lavar al niño, es imprescindible para relajarlo y descontracturarlo. El baño puede realizarse unas horas después del nacimiento en la maternidad.
El aseo del bebé debe ser un momento de intercambio entre los padres y el bebé. Aunque el baño permite lavar al niño, es imprescindible para relajarlo y descontracturarlo. El baño puede realizarse unas horas después del nacimiento en la maternidad.
Los padres siempre sienten verdadera aprensión ante la idea de bañar al bebé sin la compañía de auxiliares de puericultura. Lo esencial es tener todo a mano para realizar el baño con seguridad. Una bañera para bebé es indispensable y práctica para bañar y mantener el agua a la temperatura adecuada.
El gel limpiador para el baño
¿Cómo se realiza el baño del bebé? El niño debe lavarse con un gel limpiador, sin jabón ni perfume. El padre o madre enjabona al niño desde las partes más limpias hasta las más sucias.
En un guante suave, basta con poner un poco de gel para cuerpo y cabello. Comienza por la cabeza, los brazos, el torso y las piernas. Termina por el área del pañal. Luego, solo hay que sumergir al niño en el agua. Para verificar la temperatura del agua, coloca el codo en ella. Esta zona del cuerpo es sensible a las diferencias térmicas.
El gel limpiador debe tener una composición natural. Prefiere un frasco con bomba que permita verter fácilmente el producto en la mano o en el guante, sin derramarlo. Si el niño tiene la piel seca, cosméticos a base de avena o cold cream pueden tener una acción hidratante intensa sobre la epidermis.
Para la higiene facial, no se requiere ningún producto. Solo un poco de suero fisiológico en un algodón permite limpiar la nariz, los oídos y los ojos.
La leche de aseo
El cambio debe hacerse de 6 a 8 veces al día. En casa, con un poco de jabón y agua basta para eliminar las manchas de orina y heces. La higiene del área del pañal debe hacerse minuciosamente para evitar la propagación de gérmenes. Para las niñas, debe hacerse de adelante hacia atrás para evitar riesgos de infección urinaria.
El secado debe hacerse con suavidad, sin frotar. La humedad y la maceración de la orina son las principales causas del eritema del pañal, que se trata con una capa gruesa de pomada calmante antes de poner el pañal de nuevo.
En formato portátil, la leche de aseo permite tener un trasero impecable con un simple toque de algodón. Sin enjuague, deja la piel limpia y ligeramente perfumada. Asegúrate de que este cuidado cosmético no contenga parabenos ni fenoxietanol, que podrían ser disruptores endocrinos.
También leer:
¿Cuál es el champú ideal para tu bebé?
Lista de nacimiento: lo imprescindible para el aseo del bebé
Higiene de ojos y nariz: ¡el suero fisiológico es tu mejor aliado!