¿Cómo reparar la piel dañada?
Frágil, la epidermis puede sufrir irritaciones, que provocan heridas o eccema. ¿Qué se puede aplicar directamente sobre una piel lesionada? La prudencia es fundamental...
Frágil, la epidermis puede sufrir irritaciones, que provocan heridas o eccema. ¿Qué se puede aplicar directamente sobre una piel lesionada? La prudencia es fundamental. Es crucial privilegiar productos naturales y suaves. La piel está debilitada y debe repararse gradualmente.
Los factores de irritación en pieles sensibles son múltiples: una picadura de insecto, una alergia cutánea, una urticaria, una quemadura de primer grado, el desarrollo de un hongo… Es importante no sofocar la irritación, bajo un apósito grueso, y aplicar los productos adecuados.
Los productos nutritivos, aliados de las pieles dañadas
Una piel irritada necesita, al mismo tiempo, hidratación y grasas, para calmar la epidermis y acelerar la renovación cutánea. En irritaciones como enrojecimientos, sequedad intensa, grietas, eccema, es fundamental aplicar un producto nutritivo en capa gruesa, varias veces al día, especialmente por la noche, momento de regeneración celular.
En una quemadura, la aplicación de un cataplasma es perfecta para calmar la piel. Basta empapar una compresa con aceite vegetal y dejarla actuar 20 minutos.
Para una picadura de insecto, no es necesario rascarse intensamente, hasta irritar la piel. El hecho de rascarse solo aumenta la irritación, difundiendo el veneno en una zona cutánea mayor. Es necesario un producto calmante para reducir la irritación.
El eccema, la urticaria o una alergia requieren consulta médica. Es importante determinar la causa: alimentaria, estrés… para establecer un tratamiento.
¿Cómo tratar y cicatrizar una herida?
Una cortadura o una herida debe desinfectarse rápidamente. Si sangra, por supuesto, hay que poner una venda que se cambie varias veces al día. El uso de aceites esenciales está muy desaconsejado en una herida abierta, salvo el de incienso ládano. 2 gotas en una herida ayudan a detener el sangrado.
Durante la cicatrización, la piel necesita hidratación para acelerar el proceso. Existen remedios naturales como el aceite esencial de mirra (2 gotas diluidas en 30 ml de aceite vegetal) o de milenrama (1 gota diluida en una cucharada sopera de aceite).
En una herida cerrada, un producto de textura rica como una leche hidratante o un aceite corporal puede ayudar en la cicatrización, mediante una aplicación dos veces al día.